La vejez es una etapa de la vida llena de sabiduría y experiencias, es un proceso natural que trae consigo cambios físicos y mentales; no obstante, también es común que aparezcan ciertas enfermedades crónicas y condiciones propias de la tercera edad. Sin embargo, una correcta prevención y manejo permite que los adultos mayores no solo mantengan una buena calidad de vida, sino que también disfruten plenamente de su tiempo con sus seres queridos y permanezcan activos. A continuación, abordaremos algunas de las enfermedades más comunes en adultos mayores y recomendaciones sobre cómo gestionarlas de manera efectiva.
1. Hipertensión Arterial (presión arterial alta)
La hipertensión es una de las afecciones más prevalentes en los adultos mayores. Se caracteriza por la elevación de la presión arterial, lo que aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia renal.
Gestión:
Medir la presión arterial regularmente.
Reducir la ingesta de sodio y grasas saturadas.
Mantener un peso saludable y hacer ejercicio de bajo impacto con regularidad.
Seguir el tratamiento con medicamentos, si es necesario.
La diabetes es una enfermedad crónica que afecta la capacidad del cuerpo para regular los niveles de glucosa en sangre. En la tercera edad, la diabetes puede complicarse si no se gestiona correctamente.
Gestión:
Monitoreo regular de los niveles de glucosa en sangre para prevenir complicaciones como daños en los riñones o problemas de visión.
Seguir una dieta equilibrada, rica en fibra, proteína y grasas saludables, baja en carbohidratos y azúcares procesados.
Realizar actividad física moderada como caminar, ya que ayuda a mejorar la sensibilidad del cuerpo a la insulina.
Tomar los medicamentos prescritos por el médico de manera consistente.
3. Osteoporosis
La osteoporosis es una enfermedad ósea que reduce la densidad y calidad de los huesos, lo que incrementa el riesgo de fracturas, especialmente en la cadera, columna y muñecas. Las mujeres son particularmente susceptibles a esta enfermedad después de la menopausia.
Gestión:
Consumir alimentos ricos en calcio y vitamina D, ya que esta ayuda a la absorción del calcio.
Realizar ejercicios que fortalezcan los músculos, mejoran el equilibrio y la resistencia, como yoga, caminar o levantar pesas.
Evitar hábitos nocivos como el consumo excesivo de alcohol y taco.
Seguir los tratamientos médicos que podrían incluir suplementos o medicamentos para fortalecer los huesos.
La artritis es otra enfermedad crónica común entre los adulto mayores, caracterizada por inflamación y dolor en las articulaciones. Puede dificultar la realización de actividades cotidianas, reduciendo la movilidad y la calidad de vida.
Gestión:
Asistir con un fisioterapeuta para mejorar la movilidad y reducir el dolor articular.
Realizar ejercicios suaves como yoga o natación, para mantener la movilidad.
Mantener un peso saludable para reducir la presión sobre las articulaciones.
Utilizar dispositivos de apoyo como bastones o andadores si es necesario.
Seguir las indicaciones médicas en cuanto a analgésicos o tratamientos físicos.
Hacer uso de terapias como la hidroterapia o la acupuntura, ya que puede ser beneficioso para algunos pacientes.
5. Demencia y Alzheimer
El Alzheimer y otras formas de demencia son afecciones que impactan gravemente la memoria y la capacidad cognitiva. A medida que progresan, pueden hacer que las tareas diarias se vuelvan extremadamente difíciles, tanto para el paciente como a su familia.
Gestión:
Estimular cognitivamente con actividades como juegos de memoria, ya que puede retrasar el deterioro.
Mantener una rutina estructurada para minimizar el estrés.
El apoyo familiar es vital para el manejo del deterioro cognitivo, ya que esta ayuda emocional puede mejorar la calidad de vida del adulto mayor.
Utilizar servicios de apoyo o residencias especializadas si es necesario.
El seguimiento médico constante es clave, al igual que el manejo de medicamentos indicados para retrasar la progresión.
Las enfermedades del corazón, incluidos los ataques cardíacos y la insuficiencia cardíaca, son una de las principales causas de muerte entre los adultos mayores. Factores como la presión arterial alta, el colesterol elevado y la diabetes pueden aumentar el riesgo.
Gestión:
Mantener una dieta saludable, baja en grasas y rica en frutas y verduras.
Realizar ejercicios aeróbicos moderados, como caminar.
Evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.
Seguir el tratamiento prescrito por el médico, que puede incluir medicamentos para reducir el colesterol o mejorar la función cardíaca.
En Florecemos Más, creemos que el envejecimiento no significa perder calidad de vida, po ello es importante abordar y tratar estas enfermedades comunes en los adulto mayores. Te invitamos a conocer más sobre nuestros servicios especializados y cómo podemos ayudarte a cuidar a tus seres queridos.
¡Contáctanos!
